Álvaro Díaz
-¿Qué papel juegan los datos y la verificación de la información a la hora de combatir las fake news?
Decisivos. Son la base primordial para acabar con las noticias falsas y evitar el engaño intencionado, pero siempre que ambos parámetros sean gestionados por entes independientes como el periodismo y no necesariamente solventes porque, por ejemplo, aunque una fuente es fiable si lo dice el Gobierno, eso no quiere decir que sea la verdad. El binomio fake news y poder siempre ha existido de ahí que el periodismo haya sido muchas veces el necesario contrapoder para un equilibrio en la información.
-¿Crees que los medios de comunicación deben seguir una metodología más pautada a la hora de verificar la información?
Sí, pero una cosa es la teoría y otra la realidad. Ahora más que nunca manda la inmediatez y en ocasiones es muy difícil determinar si un suceso de última hora es real o no en los primeras horas, minutos o segundos de haberse producido. Está claro que si alguien te dice que llueve, tú deber como periodista no es contrastar con otra fuente si es verdad o no; tú obligación es asomarte a la ventana y comprobarlo por tí mismo y eso, desafortunadamente, no siempre es posible, máxime cuando estás bajo la presión de la ahora 'palabra clave' en la información: inmediatez.
-¿Qué influencia tienen las RRSS en la Opinión Pública?
Actualmente son los principales mecanismos de difusión, pero los usuarios a medida que adquieren experiencia en el manejo de las mismas cada vez tienen más claro que ni mucho menos son los jueces o árbitros de la noticia, de la información y dejan en manos tanto de las herramientas como de los verificadores que las RRSS ponen a su disposición, como si se tratara del VAR del fútbol, la decisión final de si la misma es veraz o no.
-¿Por qué crees que está tan dañada la imagen de los periodistas?
No creo que esté tan dañada o, como mucho, más que otras profesiones o sectores de la sociedad. Bajo mi humilde punto de vista, la clave está en una escala de 0 al 10 de valor añadido que logre tener un periodista y su firma para ser reconocido como riguroso, es decir, como verificador de una información que está dando. Cuanto más alto sea ese número en el citado parámetro, más alta será su credibilidad y, por consiguiente, tanto su estima entre los receptores de su mensaje como de su autoestima.
-¿Se deberían establecer unos filtros de confianza en RRSS con el fin de evitar la difusión de información manipulada?
Sí, pero primero hay que tener en cuenta que las RRSS no son medios de comunicación sino plataformas tecnológicas, circunstancia o barrera que quizás no se ha sabido transmitir y explicar de forma certera. De hecho, el actual ministro de Justicia del Gobierno de España ha manifestado que se está “planteando cambios legales para impedir que aquellos que contaminan a la opinión pública salgan impunes”. No obstante, considero que esas necesarias herramientas no deberán nunca priorizar necesariamente la información oficial y tampoco coartar la libertad de expresión para que puedan haber verificadores independientes.
