Sergio Vegas
1. ¿Qué opinión tiene acerca de la plaga de pseudoperiodistas que hay en redes
sociales?
Es complicado. Yo creo que el periodismo es una de las profesiones que más está marcada porque personas que no son graduadas como tal pueden ejercer el periodismo. Creo que hay mucha gente que no es periodista que ejerce muy bien la profesión y hay periodistas que tienen el título y que no la ejercen. Hay que diferenciar entre la gente que informa y la gente que entretiene y no pretender que alguien que entretiene te informe. Lo importante es que el usuario sea capaz de diferenciar eso y de quedarse con lo que ellos crean que es bueno, no fiarse de una sola fuente porque alguien le caiga bien. En definitiva, ser capaz de contrastar, de hacer esa labor periodística que ahora mismo está al alcance de cualquiera por la cantidad de información que tenemos. En el periodismo existe mucho intrusismo laboral y nosotros como periodistas debemos adaptarnos a ello y que el público sea capaz de elegir, yo creo que el público es inteligente para decidir donde se informa.
2. ¿Cree que es necesario que en la educación obligatoria se imparta una asignatura básica de información para enseñar a la gente a cómo informarse correctamente?
No sé si tanto como para enseñar a informarse correctamente porque esto siempre
tiene un poco de subjetividad en base de quien te lo enseñe, su ideología, su forma de pensar... Pero sí se debería tratar de generar un espíritu crítico, enseñar a la gente a sacar sus propias conclusiones viendo todas las informaciones, no fiarse de lo que diga solo una persona sino ser capaz de consultar información en otros medios, incluso los que no son afín a tu ideología. También es muy importante que se enseñe a comunicar, incluso para que esas personas que no son periodistas pero tienen un afán por la comunicación lo puedan hacer correctamente. Lo más importante es generar ese espíritu para que la ciudadanía sea capaz de entender por sí misma y sacar sus propias conclusiones de toda la información que le llega, que ahora mismo es mucha.
3. ¿De qué manera cree que se puede frenar la propagación de bulos en RRSS?
Es muy complicado, yo creo que es algo que se nos escapa incluso a los que estamos
ahí en el día a día. Es difícil porque hoy en día estamos viendo que hay gente que es capaz utilizar bots para masificar esas informaciones falsas. Creo que esto debe partir de la propia voluntad de la persona, pero creo que hay unos determinados intereses económicos, políticos y sociales, más allá de la información, que a nosotros se nos escapan. Por eso digo lo del espíritu crítico, hay que entender de donde nos llega esa información, como nos llega, no creernos todo lo que nos digan en twitter y dar ese paso de contrastar la información. La solución está más en que las personas sean capaces de filtrar toda la información que les llega, que en intentar controlar el origen de esa información.
4. ¿Crees que el Estado debe actuar de alguna manera en los medios/periodistas que difundan noticias falsas o se debe continuar con la autorregulación de la profesión?
Yo creo que lo que se tiene que hacer desde la administraciones públicas es mostrar la información con mucha claridad. Esa creo que es la mejor manera de retratar las fake news y los bulos. Yo creo que el Gobierno debe ser claro, mostrar las cosas como son y no ocultar aquellas informaciones que le perjudiquen. Considero que con la claridad todo el mundo camina mejor. Si el Gobierno fuera capaz de decirte la verdad como es, con cifras, datos y situaciones, te puede molestar más o menos pero ya acabaría con muchos bulos. El tema es que controlar todos los intereses que hay de por medio es muy complicado, son cuestiones que van más allá del periodismo porque hoy en día cualquiera puede informar e incluso dar una buena información, no quiero decir que si no eres periodista no puedas darla. Yo creo que lo más importante, como en la vida en general, es la transparencia.
5. ¿Por qué crees que está tan dañada la imagen de los periodistas?
Creo que hay varios factores, uno es la situación del periodismo actual (nivel económico, salario, condiciones...) que es muy precaria y eso hace que el periodista tenga que buscar maneras para "comer". También es verdad, y es otro factor, que los medios se han "vendido", en muchos casos, al clickbait y al sensacionalismo, ya que les repercute positivamente a nivel económico y de repercusión, y eso también hace que pueda bajar la calidad del contenido. Sin embargo, yo sigo pensando que hay periodistas muy buenos de distintos ámbitos que siguen informando bien, ofrecen contenidos de calidad y que encima son capaces de entretener. Es cierto que también puede haber periodistas cuyas informaciones estén influenciadas por una determinada línea ideológica. La crisis de hace unos años también afectó mucho y ahora hay gente en redes sociales que influencia e informa más que el propio periodista. Yo creo que es una mezcla de todo esto, aunque también creo que los periodistas se han ido adaptando a esto y veo a las nuevas generaciones con muchas ganas de informar, entretener y dar contenidos de calidad. Por eso creo que hay que ser optimistas.
6. Hace unos años entraste en el mundo de Youtube con tu canal sobre baloncesto, ¿crees que se ha acabado con el prejuicio negativo sobre los medios digitales alternativos (redes sociales, Youtube…) que había en el periodismo hace unos años?
Se está acabando, creo que el confinamiento está ayudando a mucha gente a darse
cuenta de que Youtube también es un plataforma para informar y para entretener. Creo que ha habido mucha reticencia por parte de los medios tradicionales, que también la hubo cuando aparecieron las RRSS, recuerdo que a muchos periodistas le
costó abrirse una cuenta de Twitter en su momento. Sobre todo hay miedo a lo desconocido y aquí al final a los que les ha ido bien es a los valientes que en un primer momento se atrevieron a probar Twitter, Youtube, Twitch, etc. Youtube ahora mismo es una realidad porque te aporta información y crea una marca, yo siempre pongo ejemplos como Charlas de Fútbol o Maldini, que es un ejemplo claro de un periodista clásico reconvertido al periodismo multimedia. Por ejemplo, Iñaki Gabilondo con su blog, aunque no esté en Youtube, ha hecho exactamente lo mismo, dar desde lo audiovisual un contenido que a la gente le gusta más. Creo que es una realidad y que las empresas se están dando cuenta de que los periodistas que hacen periodismo en estas plataformas también son una opción válida. Hay periodistas en Youtube que tienen más influencia que otros en los medios tradicionales. Esto no significa el fin de los medios tradicionales, sino el inicio de una convivencia.
